Si quieres que tu cabello resplandezca como nunca lo ha hecho antes, te vamos a explicar la mejor manera para conseguirlo, simplemente siguiendo unos consejos muy sencillos que no te quitarán nada de tiempo y con los que conseguirás lucir una melena de película.
El lavado
El lavado es un proceso muy importante a la hora de lograr un cabello precioso. Para ello debes escoger tu champú ideal, que será el que se adapte mejor a tus necesidades. Si tienes el cabello dañado, deberá utilizar un producto específico para ello, pero si lo tienes graso, opta preferiblemente por un champú suave que sea para uso frecuente.
Para lograr una melena brillante y limpia, deberás utilizar poco champú y mucha agua. No frotes en exceso ya que además de lograr que se enrede el cabello, puedes eliminar los aceites naturales que lo protegen.
Resulta imprescindible el uso de acondicionador. Se debe aplicar desde la mitad de tu melena y hacia las puntas, extendiéndolo con la ayuda de un peine o de los propios dedos. Espera unos minutos y después acláralo.
El broche de oro lo conseguirá el enjuague. Si lo realizas bien, este proceso se convertirá en un perfecto tratamiento de belleza capilar. La clave consiste en usar agua fría, mejor mineral, o bien agua del grifo a la que se puede añadir unas gotas de vinagre.
El secado del cabello
Aunque en ocasiones es muy tentador saltarse este paso, sobre todo en la época de más calor, es necesario hacerlo ya que si no, se puede acabar con el cabello reseco y mate.
Si vas a optar por usar un secador, se debe alejar cómo mínimo unos quince centímetros del cuero cabelludo y evitar moverlo en cualquier dirección, ya que lo que se conseguirá es alborotar y resecar la melena. Es mejor utilizar un cepillo redondo para levantar las raíces.
Si el cabello está estropeado y seco, hay que aplicar previamente un producto que le proteja del calor. Lo que nunca se debe hacer es irse a la cama con el cabello todavía húmedo, así como frotárselo con la toalla vigorosamente o dejar secar el pelo al aire. Estas costumbres, a la larga, acabarán estropeando la melena.
Un producto ideal para cada tipo de cabello
Los aceites para los cabellos muy secos aportan suavidad e hidratación. Están indicados especialmente para los casos en los que el pelo con tendencia a encresparse. Si el cabello es graso o muy fino, se debe aplicar solo en los extremos.
Existen redensificadores para los cabellos sin volumen y débiles que se pueden encontrar en forma de sérum, nutricosméticos, champús, etc. Con ellos se consigue restablecer el equilibrio capilar, estimulando al crecimiento del pelo y fortaleciéndolos.
Los voluminadores para las melenas lacias, elaborados con fórmulas especiales, aportarán más cuerpo a la melena. Se pueden encontrar en acondicionadores, en champús, etc. Puede usarse un spray para levantar las raíces igualmente.