El hígado es el encargado de realizar ciertas funciones que son imprescindibles para que el organismo sea capaz de eliminar las sustancias nocivas y las toxinas que de manera consciente o inconsciente, se van consumiendo a lo largo del día. Y es que lo que comemos y bebemos influye directamente en lo que va a trabajar nuestro hígado, por eso es bueno limpiarlo de manera habitual con una dieta depurativa para que funcione correctamente siempre. Toma nota del siguiente menú semanal para limpiar tu hígado.
Las funciones del hígado
Este órgano se encuentra situado en la parte superior derecha de la cavidad abdominal y resulta esencial para el correcto funcionamiento del cuerpo humano, estando relacionado con más de quinientas funciones del mismo.
El hígado es responsable de controlar la glucosa del organismo, la bilis que produce contribuye al transporte de desechos y a la descomposición de las grasas en el intestino delgado, generando algunas de las proteínas necesarias para el funcionamiento correcto del plasma sanguíneo, procesando la hemoglobina para una correcta absorción del hierro y regulando los niveles de aminoácidos en la sangre, entre otras muchas cosas.
Podría decirse que el hígado es el depurador del cuerpo, por lo que un hígado en malas condiciones o graso, no va a permitir que las gasas y las toxinas se eliminen del organismo, lo que favorecerá las enfermedades infecciosas o los procesos inflamatorios entre otras problemas de la salud. Por ello y para que el hígado realice todas sus funciones sin ningún contratiempo es necesario que se le presente la atención adecuada y empieza por revisar la dieta.
Una dieta para eliminar las toxinas
Con seguir una dieta concreta durante unos días bastará para eliminar las toxinas que se acumulan en el hígado y desintoxicarle, además de ayudar en la eliminación de los líquidos retenidos.
Lo primero que se debe hacer al levantarse cada mañana es tomarse un vaso de agua templada con un poco de zumo de limón. Transcurrida media hora aproximadamente se debe desayunar un batido preparado con leche vegetal o descremada, la mitad de un plátano, una manzana verde y un té verde. A mitad de mañana se puede tomar un yogur bajo en grasa o una ración de verduras junto con una taza de té verde.
A la hora de comer 150 gramoso de de jamón York, una ensalada de alcachofas con una cuchara de aceite de oliva virgen extra, una rebanada de pan y una taza de té verde. Para merendar una rodaja de piña fresca y otra traza de té verde.
Para cenar un plato de ensalada verde aderezada con un chorrito de aceite de oliva y un poco de zumo de limón, junto con un plato de perca asada, un plato de puerros aderezado también con una cuchara de aceite de oliva virgen extra y dos rodajas de piña fresca.
Combinar el consumo de té verde con verduras es una manera eficaz de eliminar toxinas y depurar el hígado, de hecho, la base de una dieta depurativa para el hígado debe incluir verduras de hoja verde, y calabazas o zanahorias en la comida o en la cena. Durante lo días que dure la dieta se deben evitar los dulces y aumentara el consumo de agua.