Los ojos rojos son muy comunes en nuestro día a día. Sin embargo, hay que entender la causa de este enrojecimiento para saber cómo reaccionar ante cada una de las tipologías.
En este artículo de doy más información detallada acerca de cómo afrontar el asunto. Para evitar los ojos enrojecidos, que te produzcan además ese típico e indeseable picor, lo fundamental es intentar comprender el origen del problema, que ya puede deberse a diferentes factores externos, como virus, bacterias, polen, alergias, etc.
Así que, una vez comprendas cual es tu sintomatología, cosa a la que también te puede ayudar tu médico, deberás seguir unos cuantos consejillos para evitar esta afección. Aquí te explico qué hacer dependiendo de cada una de las sintomatologías el tipo de conjuntivitis que te puede estar afectando:
- Si es una infección bacteriana: Suelen producir secreciones purulentas y espesas. Se trata con antibióticos, que pueden ser gotas o pomadas, y son aplicados generalmente en el interior del párpado. Como en todas las enfermedades infecciosas, exige medidas de higiene escrupulosas para evitar el contagio a los que te rodean.
- Si es de origen viral. Un culpable muy frecuente es el virus del resfriado. Es extremadamente contagiosa, la conjuntivitis viral requiere unas medidas de higiene rigurosas, lavándose las manos a menudo y evitando compartir con otras personas ropa de cama, toallas y objetos personales.
- Si es por agentes irritantes. Primero que identificar el agente y si ya se ha producido el contacto, para calmar la irritación hay que lavar los ojos con agua durante cinco minutos. Si ha sido por algún tipo de ácido recuerda que debes acudir a tu médico lo antes posibles para evitar problemas de causa mayor.
- Si es consecuencia de una alergia. Este tipomejr con el tratamiento que indique el especialista.
- Si es por “síndrome del ordenador”. Esto es muy comun en nuestros días, ya que pasamos muchas horas con la vista en la pantalla y apenas sin pestañear o desenfocar la mirada del monito. Para evitarlo, concédete descansos cada 30 minutos (procura parpadear y fijar la vista en puntos lejanos en ese rato). Las lágrimas artificiales son un buen aliado también pueden ser buenas aliadas para evitar el enrojecimiento ocular.
Y ya sabes, si la rojez persiste por varios días, debes de visitar el especialista y explicarle tu caso de manera personalizada. Él sabrá exactamente qué tratamiento se adecúa a tus necesidades.