Cuando la glucosa en la sangre es bastante más baja de lo normal, se produce un cuadro de hipoglucemia que puede afectar, por regla general, a todas aquellas personas que deben administrarse insulina o aquellas que toman algún tipo de medicamentos para la diabetes.
¿Qué es la hipoglucemia?
La presencia de azúcar en la sangre, es conocida como glucemia y se mide cuando se cuantifica la cantidad de ésta en miligramos, por cada decilitro de sangre. Cuando se da un cuadro de hipoglucemia es porque los niveles del azúcar en sangre son más bajos del mínimo normal siendo éste de 70 mg/dL.
Un episodio de hipoglucemia se puede manifestar de distintas maneras y en cualquier caso requiere un tratamiento lo antes posible. En caso de ser leve, puede tratarlo el propio paciente, estableciéndose los niveles de azúcar en la sangre, con bastante facilidad. Si el episodio es moderado, aparecerán algunos síntomas que pueden servir de advertencia a quien lo sufre para que pueda tomar las decisiones más adecuadas. En este caso, por tanto, también puede tratarlo el paciente. El episodio inadvertido suele ser el que es detectado por las personas que rodean al diabético y el severo es aquél en el que el paciente necesite la ayuda de cualquier otra persona, ya que el mismo no puede resolverlo.
¿Por qué ocurre la hipoglucemia?
La hipoglucemia puede tener diferentes causas. En las personas que no son diabéticas puede deberse a un ayuno muy prolongado mientras que en las personas que sí padecen diabetes, suele ser un cuadro muy habitual. En estos casos, las causas pueden ser diversas. Si se ingiere un medicamento de tipo oral o una dosis de insulina demasiado grande para la alimentación que se haya ingerido, puede producirse un cuadro de hipoglucemia. De igual manera que si existe una actividad física mayor a la que se haya previsto, ya que cuando esto sucede también la cantidad de insulina producida por el cuerpo puede ser excesiva, provocando uno de estos episodios. También puede ocurrir cuando una persona que padece diabetes de tipo uno o dos, se aplica la insulina o su toma de medicamento y después no come nada durante las horas siguientes.
Otro tipo de causas pueden ser un error en el horario de las dosis a tomar, equivocación del tipo de insulina inyectada, una ingesta excesiva o insuficiente de carbohidratos, retrasos en los horarios de las comidas, una neuropatía gástrica, o lo que es lo mismo, una excesiva lentitud en el vaciamiento del estómago así como no hacer caso de los síntomas de una manera temprana, ya que de esta manera se demora el tratamiento y se provoca una hipoglucemia mucho más severa.
También existen diversos factores que se encuentran asociados con una hipoglucemia como el beber alcohol sin haber ingerido comida, un exceso de aspirinas, medicamentos para la hipertensión, una infección muy fuerte, insuficiencia hepática o renal, problemas de tiroides o durante el primer trimestre del embarazo.