Hasta hace algunos años los sótanos eran unos espacios que prácticamente ni los considerábamos como parte de nuestro hogar. La mayoría de veces estaban abandonados y, en el mejor de los casos, tenían como única finalidad guardar todas aquellas cosas que no usábamos y que seguramente jamás volverìamos a utilizar. Por suerte, hoy este punto de vista ha cambiado, y, si tenemos la suerte de tener un sòtano en nuestra casa, debemos aprovecharlo, convirtiéndolo en un lugar donde estemos a gusto y el cual nos sea de utilidad. Además, normalmente son espacios diáfanos y amplios, ya que suelen tener la medida de la casa, por lo que se les puede sacar mucho partido.
Los sótanos suelen tener algunas desventajas, como el hecho de no tener apenas luz natural, en algunos casos ninguna, y ser espacios poco ventilados. Es importante pues que no sólo le demos un uso sino también que pongamos los cinco sentidos en su decoraciòn, para hacer que estos inconvenientes se reduzcan al máximo, por ejemplo instalando una buena instalación de luz.
Para decorarlo adecuadamente hemos de saber què uso le daremos. Las posibilidades con innumerables. Lo podemos usar como un taller, para trabajar tranquilamente en él, o incluso no estaría nada mal la idea de una despensa para los alimentos no perecederos, pudiendo incluso instalar en este caso también una pequeña bodega en la que guardar los vinos. En ambos casos, pintando las paredes y a base de estanterìas y algún detalle con gracia conseguiremos un lugar adecuado.
Otra buena opción puede ser convertir este lugar en un gimnasio, un lujo que normalmente no nos podemos permitir por cuestión de espacio. En este caso, para la decoración lo ideal serán paredes blancas y mobiliario de metal, que quedarà perfectamente integrado con los aparatos.
Otra idea es pintar las paredes con colores alegres, incluso si disponemos de tiempo con dibujos, y convertirlo en una gran habitaciòn de juegos para los niños. Van a tener mucho espacio no sólo para jugar sino también para guardar todas sus cosas.
Y no está tampoco nada mal convertirlo en un espacio de reunión para cuando tengamos ganas de estar con nuestros amigos. Si ponemos una mesa, unas estanterías, unos sofás para estar cómodos, un televisor, juegos de mesa, y lo que nos parezca oportuno, podemos crear un agradable espacio para una celebración, una tarde viendo una película o un partido de fútbol, jugar una partida, o simplemente un lugar tranquilo donde charlar.