Este alimento es imprescindible en nuestra gastronomía por su gran versatilidad, aparte de ser necesarios en nuestra dieta al estar llenos de vitaminas y de minerales y por supuesto, porque son muy fáciles de hacer y resultan muy económicos.
Milhojas gratinadas con cebolla y bechamel
Para preparar unos huevos de una manera distinta, tan sólo se necesitan 6 huevos bien frescos, tres cebollas, 100 gramos de mantequilla, treinta gramos de harina, 1 cuchara de azúcar moreno, una pizca de sal y 50 gramos de queso rallado.
En primer lugar se deben pelar las cebollas para después cortarlas en juliana muy finas. Se derrite la mitad de la mantequilla en una cacerola y se agrega la cebolla con un poco de sal y el azúcar. Se carameliza todo a fuego lento durante unos 30 minutos, removiéndolo de vez en cuando y en el momento en que esté todo bien pochado, se retira y se reserva.
Para preparar la bechamel se debe calentar la leche en una cacerola mientras vamos derritiendo la mantequilla que ha sobrado en una sartén también a fuego lento. Agregamos la harina y dejamos que tome algo de color sin llegar a que se tueste en exceso. Removemos con una cuchara de madera hasta que la masa se pueda desprender fácilmente de las paredes y vertemos la leche hirviendo para remover durante unos 5 minutos más a fuego lento.
Los huevos deben estar cocidos previamente y cortados en rodajas para colocarlos en una fuente con una capa de la cebolla caramelizada e ir alternando esta secuencia para terminar con el huevo y bañarlo todo con la bechamel espolvoreada con un poco de queso. Gratinamos en el horno durante unos minutos y servimos.
Nido de patatas, tomate y jamón
Para preparar este plato necesitamos dos patatas, cuatro huevos, algo de aceite y un poco de vinagre. Para preparar la salsa de tomate son necesarios dos dientes de ajo, una lata de tomate triturado, una cebolla, un poco de aceite y otro de sal y una pizca de azúcar. Para decorar se necesitan 50 gramos de jamón ibérico.
En primer lugar procederemos a preparar la salsa de tomate rehogando la cebolla y el ajo bien picado en aceite muy caliente al que incorporaremos el tomate triturado que dejaremos cocer durante 20 minutos a fuego suave. Sazonamos con sal y con un poco de azúcar en caso de que estuviera muy ácida la salsa.
Para preparar los nidos debemos pelar y rallar las patatas y calentar mucho aceite en una cacerola bien honda. Ponemos una capa de las patatas entre un colador pequeño y otro más grande y las sumergimos en el aceite para freírlas bien y después colocarlas en papel absorbente de cocina para eliminar el exceso de grasa.
En una sartén se coloca agua y vinagre y en el momento en que rompan a hervir ambos, se baja el fuego y se incorporan los huevos uno a uno para ir envolviendo con una espumadera la yema con al clara continuando la cocción durante 3 minutos más.
En un plato de servir se colocan los nidos de patata y se rellenan con el huevo escaldado acompañándolos de la salsa de tomate y decorándolos con un poco de jamón ibérico.