Aunque puedes hacer este plato usando menestra de la que venden congelada, te aconsejo que la pruebes tal cual está en la receta, usando verdura fresca (aunque alguna en concreto como las habas o los guisantes sean congelados), ya que así, con una cocción lenta y añadiendo cada producto en su momento, no tiene punto de comparación el resultado. 
Ingredientes para 4 personas: pollo (puede ser un pollo troceado o una pieza de ¼ para cada persona, según te guste más), 250 grs. de patatas, 150 grs. de guisantes, un par de zanahorias, 200 grs. de habas, 3 cebolletas, 2 dientes de ajo, 1 ramito de hierbas aromáticas (laurel, apio, perejil…), 1 vaso de vino blanco, 1 taza de caldo de pollo o verduras, pimienta negra, aceite de oliva y sal.
Si las habas no son de las congeladas, escáldalas en agua hirviendo durante unos 3 minutos.
Pela las patatas, las zanahorias y los ajos. Trocea las patatas y las zanahorias. Pica los ajos. Corta las cebolletas por la mitad.
Pon una cazuela al fuego con aceite de oliva y dora el pollo, al que habrás echado sal. Añade las cebolletas y los ajos. Cuando el pollo esté bien dorado aparta las cebolletas de la cazuela y resérvalas.
Vierte entonces el vino en la cazuela y deja cocer a fuego suave unos 5 minutos, para que se evapore el alcohol. Añade ½ litro de agua hirviendo, el ramito de hierbas, sal y un poco de pimienta negra. Tapa la cazuela y deja que vaya cociendo todo junto, siempre a fuego suave, durante una hora.
Pasado este tiempo añade las patatas y las zanahorias. Al cabo de 10 minutos añade los guisantes y las habas. Al cabo de 10 minutos más retira el ramito de hierbas y añade la taza de caldo. Deja dar unos hervores y ya puedes apartar la cazuela del fuego.
Sirve bien caliente, junto con las cebolletas.
