En esta nota, te contaremos todo aquello que necesitas saber si estás pensando en someterte a este tipo de cirugía: técnicas, formatos, criterios médicos y pautas legales. Hoy en día, son cada vez más las mujeres que deciden colocarse implantes, pero al mismo tiempo, son cada vez menos las que deciden informarse antes de realizar este tipo de procedimientos. En esta nota, un grupo de cirujanos argentinos, nos cuentan los datos más importantes a saber al momento previo de tomar semejante decisión. “Antes de indicar la colocación de un implante mamario, hay que evaluar muy bien los casos de mujeres con antecedentes familiares de cáncer de mama o con patologías mamarias predisponentes a esta enfermedad, como algunas displasias mamarias. En estas circunstancias, lo indicado es colocar un implante no demasiado grande, detrás del músculo pectoral”, cuenta uno de los médicos titulares de la Sociedad Argentina de Cirugía Plástica, Estética y Reparadora. En base a este punto fundamental, pasamos a responder algunas de las dudas más frecuentes sobre este tema.
- ¿Qué tipos de implantes existen? Hay diferentes formas, perfiles, rellenos y texturas en lo que a implantes mamarios se refiere. Los redondos son los más utilizados. Cuando se habla de perfiles, se refiere a la altura que el implante tiene. A mayor altura, habrá mayor protección de la mama. Existen también con forma de gota, denominados anatómicos.
- ¿De que material están hechos? Los implantes modernos están rellenados con un gel cohesivo de silicona que en caso de ruptura no se disemina ni migra hacia las axilas o ganglio linfáticos. Sobre la textura, existen los “texturizados o rugosos”, que se usan mayormente delante del músculo pectoral, y los lisos, que son los más utilizados detrás de este músculo.
- ¿Cómo elegir el tamaño adecuado? Para este paso, se debe tener en cuenta la contextura física, el tipo de tórax y la forma y volumen de la propia mama. También se deben analizar la caída, la proyección y la separación de las mamas, todos ellos factores fundamentales al momento de determinar el tamaño a implantar.
- ¿Cómo saber si el implante está aprobado? El organismo pertinente (en Argentina), es la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT). El implante en cuestión, debe tener su aprobación para la venta y uso en el país, así como también ocurre en el caso de los medicamentos. Lo que es importante verificar, es que se trate de una autorización real (Figura en la caja del implante), y no solo de un número de iniciación de trámite.
- ¿Qué es el “encapsulamiento”? Se trata de una de las complicaciones mas comunes en la cirugía estética de inclusión de implantes mamarios. El implante, como bien sabemos, es un cuerpo extraño, inerte, motivo por el cual el organismo trata de bloquearlo, entonces, en algunos casos, lo cubre generando una película muy fina que se denomina cápsula fibrosa. Claro que existen distintos grados de encapsulamiento, que pueden valorarse por la escala de Baker, según la cual las cápsulas fibrosas retráctiles son clasificadas de I a IV. En la cápsula I, la mama está ligeramente tensa, aunque no se perciba objetivamente. La cápsula II, por su parte, es más gruesa y produce una mayor tensión, que puede palparse. Puede incluso generar cierta molestia cuando se está en posición acostada boca abajo. La cápsula de grado III, es todavía más gruesa, la mama se pone consecuentemente más dura, y en la mayoría de los casos provoca dolor. En última instancia, la cápsula de grado IV, tiene los componentes de la III, pero además se puede encontrar constreñida o deformada. En las dos primeras es habitual la indicación de tratamiento con aplicación de ultrasonido y masaje; en cambio, la II y la IV son de resolución quirúrgica.
No te pierdas la segunda parte de este informe, que se publicará el martes 03/08.