Hoy en día, con la cantidad de fuentes de información a las que tenemos acceso, no es de extrañar que una que otra vez nos hagan creer cosas que no son ciertas.
En esta nota, nos encargaremos de desmentir algunos mitos relacionados a la belleza, para
Los tónicos resecan y opacan: Falso. Los tónicos faciales de hoy no son como las antiguas lociones astringentes, formuladas con alcohol. Las versiones modernas contienen agentes hidratantes (fíjate en la lista de ingredientes si el tuyo tiene glicerina, aloe vera y/o aceites esenciales) que realmente cuidan tu piel. Son ideales para usar después de la emulsión de limpieza y antes de tu tratamiento habitual, porque acondicionan el cutis para que actúe como una esponja: cuando la piel está más suave absorbe mejor el producto.
La cafeína reseca tu piel: Verdadero. Las bebidas que te ponen pum para arriba, como las gaseosas cola, bebidas energizantes y el café, son vasoconstrictoras, es decir, estrechan los vasos sanguíneos, lo que hace que lleguen menos fluidos a tu piel. Eso implica que tendrás más líneas de expresión, en especial alrededor de los ojos, ya que la piel de esa zona es más finita, por lo que los efectos son mucho más visibles en esa área. Un dato extra: si estás con el estómago vacío, empeora el cuadro, por eso, intenta comer algo antes de consumir cualquiera de estas bebidas.
Todas necesitamos humectación: Verdadero. Todos los tipos de piel requieren humectación. El hecho de que tengas el cutis graso no significa que esté hidratado. Todas las mañanas debes usar una loción que contenga FPS, y por las noches, luego de lavarte la cara y secarte con una toalla limpia, aplica una crema adecuada para tu tipo de piel; en especial si sientes la cara tirante.
Los poros se reducen: Verdadero. Los poros se ven enormes cuando se cubren de oleosidad. El aceite se oxida con el aire y hace que los poros luzcan más oscuros y profundos. Por eso, si tienes los poros dilatados, utiliza diariamente alguna crema o gel limpiadora para pieles mixtas y hazte una exfoliación suave al menos dos veces a la semana para reducir el tamaño de tus poros.
Tu cuero necesita un descanso de FPS para producir Vitamina D: Verdadero. Este caso no es para tomar “a pecho”: con solo 10 minutos de sol es suficiente para generar vitamina D, por eso no hay que utilizar esta regla todo el tiempo. Esa exposición no tiene que ser sobre tu cara y es importante que ahí utilices un protector adecuado. Tus brazos sí pueden quedar libres, pero por un rato. En caso de que seas alérgica al sol o no te guste exponerte, puedes utilizar un suplemento de vitamina D, para evitar que tu cuerpo tenga que generarla.
Comer comida chatarra no afecta tu piel: Falso. Los dermatólogos han estado jugando al pin pong con este tema durante años, pero hoy coinciden en que existe una conexión entre la dieta y la piel. Los estudios han demostrado que los carbohidratos refinados disparan los niveles de insulina y favorecen la producción de grasa. Lo mejor para tu cutis: proteínas magras, hidratos de bajo índice glucémico, frutas y vegetales.
Lleva meses ver los efectos de una crema anti-age: Falso. La mayoría de las fórmulas antiedad contienen ingredientes exfoliantes y vitamina B y E que cambiarán tu piel a las pocas semanas de uso. Si bien los efectos son graduales, en seis semanas aproximadamente, podrás notar un aumento de la hidratación y la tersura, más luminosidad y menos líneas de expresión. Sin embargo, dependiendo el grado del problema, puede llevar más o menos tiempo ver los resultados; por eso, es conveniente acudir a un dermatólogo para que nos indique cual es la fórmula que más nos conviene.