Según lo dictado por la moda, en este año, la tendencia del maquillaje será una mezcla de todo lo conocido. Todo valdrá a la hora de alcanzar el estilo personal.
En esta nota, algunos consejos para que tengas en cuenta a la hora de crear tu propio look. 
No hay reglas: Así como en años anteriores predominaba una paleta o una técnica de maquillaje, este año la propuesta es no aferrarse a ninguna consigna, sino armar cada una sus propias reglas. En pocas palabras, puedes maquillarte según tus propios gustos, según lo que consideres que mejor te sienta. Y si deseas salir maquillada como una femme fatale en pleno mediodía, ¡Adelante! ¡Todo vale!.
- Respeta el pasado: Lo que fue nutre el hoy. Cuanto más retrocedemos en el tiempo, más avanzamos y profundizamos en quiénes somos y qué queremos. El pasado es una excelente fuente de inspiración: el look de Marilyn, el full color de los 60 o el estilo de los 80´s. Capitaliza el aprendizaje de décadas anteriores.
- Sé emocional, no racional: Hoy, lo que te moviliza, es lo que manda. ¿Qué conecta con tus emociones? Quizá quieras sacar a relucir tu costado más sexy y sientas que para eso vas a necesitar maquillarte en colores intensos, o no, quizá lo que buscas es sentirte fresca y natural, y para es te basta con un simple tapa ojeras y un brillo labial.
- Los clásicos: En caso de que quieras maquillarte intensamente ojos y boca, puedes hacerlo. También vale el nude total, o el maquillaje sutil en el rostro y la boca bien roja. La moda es ser individual. La tendencia, lo que mejor se ajusta a tus gustos. No te reprimas a la hora de buscar tu look. Aprovecha el “vale todo” para jugar con tus maquillajes y tus estados de ánimo.
- Invéntate a ti misma: Hay una realidad y es que cuando nadie te dice lo que tienes que hacer te obliga indirectamente a decidir. Si bien esa libertad a veces desorienta, es lo que te permite en definitiva explorar y saber quién eres. En este nuevo siglo, las mujeres estamos hartas de mandatos y obligaciones. Queremos ser , y de eso se trata: hoy puedes definir tu persona, quien te gustaría ser, y jugar a eso. Hay un largo recorrido por delante, y a fuerza de prueba y error encontrarás finalmente lo que te haga sentir más cómoda.
