Es inevitable, a todas nos pasa, cada vez que miramos una revista de moda soñamos con ser (o al menos parecer) una de esas diosas que aparecen (en cualquier página) y vestir siempre a la última moda, estar siempre impecables Planteado el problema… y la posible solución… nos damos cuenta que es un objetivo poco probable…por lo cual, volviendo a la realidad, podríamos plantear las siguientes 2 soluciones que serían un poco más beneficiosas:
- Dejar de comprar revistas y aislarte completamente del mundo de la moda y sus tendencias o,
- Aprender a captar la información que realmente vale de esas revistas y utilizarla a nuestro beneficio en forma práctica.
Para comprender un poco mejor como funciona el mundo de la moda, vamos a tratar de desmenuzar la información que nos quieren vender con cada publicación… En las revistas sólo aparecen personas bellas, jóvenes y extremadamente delgadas…por lo cual podríamos deducir que si no cumplimos con estas características, no tenemos derecho a utilizar la moda… pero este es el error número 1 que solemos cometer todas las mujeres. En las revistas se utiliza a las modelos y a los espectaculares escenarios que suelen tener de fondo para hacer lucir en su mayor esplendor el producto a vender (osea la moda). Es lo mismo que sucede en todos los negocios, en una casa de electrónica siempre veremos en las vitrinas los últimos modelos de electrodomésticos, de computadoras y de celulares… así como en la verdulería siempre veremos expuestas las frutas más atractivas (las infaltables manzanas lustradas) para que se vean más tentadoras.
Es así de simple, es la forma estratégica de marketing de la moda… si estamos conformes o no, no importa, el punto es que funciona y de ésta forma venden bastante bien… Las mujeres pasamos horas imaginando como luciríamos nosotras mismas viéndonos tal cual vemos a la modelo, pero cuando dejamos de soñar nos damos cuenta que nuestro cuerpo no es igual al de ellas, por lo cual descartamos la idea… Hay una diferencia fundamental entre nosotras y las modelos: cada mujer tiene su trabajo al cual le dedica mínimamente de 6 a 8 horas por día, tenemos nuestros estudios, y nuestra casa de la cual ocuparnos (en muchos casos)… En cambio las modelos tienen esas horas del día libres para dedicarse a hacer gimnasia, tratamientos de belleza, y tienen detrás de si un equipo de maquilladores, peinadores y vestuaristas que se ocupan de que siempre se vean bien… mientras que nosotras solo contamos con nuestras 2 manitos para hacer todo eso y generalmente no tenemos más que 20 minutos para arreglarnos. Otra cosa importante: no contamos con el photoshop para arreglar nuestras imperfecciones a la hora de salir a la calle! Entonces, si tenemos todas las obligaciones que tenemos en nuestra vida, se supone que somos lo suficientemente inteligentes para entender que nosotras no somos modelos, pero valemos tanto o más que ellas… no debemos boicotear nuestra autoestima pensando en porque no lucimos perfectas, sino aprender a sacar lo mejor de nosotras mismas y de lo que pueden enseñarnos las revistas de moda.
Habiendo aclarado entonces las diferencias entre nosotras y las modelos, vamos al punto en cuestión: Aprendamos a exprimir la información útil de las revistas.
- Las tendencias: son fácilmente identificables… siempre suelen tener un gran cartel en fucsia o amarillo que las menciona como “los imperdibles de la temporada”. Visualiza bien cada una de ellas y busca cual es la que mejor se adaptaría a tu cuerpo y a tu personalidad. Una vez que tengas la idea clara en tu cabeza tienes 2 opciones: si tu bolsillo te lo permite, puedes ir a comprarla… y si te resulta demasiado costosa, siempre vas a encontrar modelos similares en negocios que no sean los de las primeras marcas, o en su defecto en outlets. No vale la pena gastar mucho dinero en tendencia, pues la temporada que viene, ese objeto de deseo ya estará totalmente fuera de moda.
- Los clásicos: Si bien se actualizan un poco cada temporada, siempre estarán vigentes, por lo cual en este caso si vale la pena invertir en buena calidad (o en caso contrario, si es uno barato no te preocupes, pues la próxima temporada encontrarás uno similar por el mismo precio). Lo que debes aprender de cada temporada es la “tendencia” de cómo llevar cada clásico… y ésta está generalmente indicada por los accesorios con los que se combinan. Así de fácil.
- Los diseñadores: Si mueres por el estilo particular de un diseñador o de una casa de moda (hablamos de las mundiales y no tanto de las locales) por ejemplo, eres adicta a Versace o Cavalli… y mueres por las prendas que éstos muestran en las revistas…pero eres consciente que para comprarte uno de esos deberías vender a tu madre y aún así estarías en deuda, no desesperes! Si bien siempre tardan un tiempo en llegar, nunca van a faltar las copias e imitaciones de las grandes marcas…Sólo debes salir a buscar… y el precio será sumamente accesible en comparación con el primero.
- Estilo: Cada temporada tiene un estilo distinto. El estilo se refiere a la forma en que se lleva la ropa junto con los accesorios de la temporada. Debes prestar entonces atención a los bolsos, zapatos, bijou… determinar los colores, formas y tamaños que se usan en cada temporada y cómo se combinan éstos tanto con los clásicos, como con las “tendencias”. Los accesorios siempre serán la forma más accesible de verte a última moda, pues son los que verdaderamente completan un conjunto, y además existen multitudes de ellos y para todos los bolsillos.
- Maquillaje y peinados: Cómo todo, varían en cada temporada. Observarlos y adaptar el que más te guste es el objetivo. No te dejes caer en las modas alocadas si repentinamente se usa el pelo rapado y con una cresta verde… pues podemos asegurarte que en 2 semanas estarás totalmente arrepentida del cambio. Debes conocerte y saber qué es lo que mejor se adapta a ti misma de cada uno.
Entonces, ahora que sabes como sacar la información útil de las revistas, comienza a adaptar la información a tu propio beneficio… y podemos asegurarte que no te verás como una modelo sino mucho mejor, porque habrás sacado lo último de la moda y lo habrás adaptado a tu persona y personalidad, por lo cual no te verás igual que todas sino tán solo como el ser único que eres.