Un uso muy frecuente de la plancha alisadora, normalmente trae consecuencias en la salud de tu cabello, pero como resulta una herramienta casi indispensable en los rituales de belleza, debes aprender cómo utilizarla.
Escoger la mejor plancha
Son muchas las planchas existentes por lo que a la hora de elegirla lo más probable es que te decantes por la más económica, pero en cualquier caso se deben tener en cuenta ciertos detalles como por ejemplo que si tu cabello es corto, puedes elegir una plancha que sea de un tamaño pequeño para que la puedas manejar mucho mejor.
Intenta elegir una plancha que cuente con un revestimiento de titanio, de turmalina o de cerámica. A partir de aquí, puedes optar por la que tenga mejor o menor calidad. En cualquier caso las mejores y con el precio más ajustado son las de cerámica, ya que con ellas el pelo se desliza mucho mejor y el calor se transmite de mejor manera sin que llega a quemarlo.
La temperatura de la plancha debe estar entre los 75 grados centígrados y los 240, siendo la ideal de 190 grados.
Alisado en seco
Jamás utilices la plancha con el cabello húmedo ya que lo podrías llegar a quemar. Lo habitual es secarse el pelo con el secador y a continuación usar la plancha, pero hay que tener en cuenta que las dos herramientas dan un intenso calor, por lo que a largo plazo dañarán tu cabello. Por ello lo más correcto es dejar que el pelo se seque por sí mismo al aire libre y a continuación usar la plancha.
Protección capilar
Son muchos los productos que ayuda a proteger el pelo del calor. Si optas por un protector capilar, deberás aplicarlo con el cabello todavía mojado y a continuación usar un peina que tenga amplias cerdas para dejar que se seque mientras lo vas expandiendo poco a poco.
El protector capilar se puede usar a diario, siendo recomendable igualmente que al menos una vez a la semana, te apliques una mascarilla capilar.
Desenreda tu cabello y divídelo
Es muy habitual levantarse por las mañanas y hacer uso de l plancha de igual manera que se utiliza un cepillo ya que es rápida y deja el peinado deseado, pero hay que tener en cuenta que NO es lo adecuado. Si se desea tener un cabello bonito, cuidado y sano, será necesario dedicar algo más de tiempo.
Para ello hay que cepillar bien el cabello ya que si hay nudos o cabello enredado se quemará y el resultado será desastroso. A continuación hay que dividir el cabello en mechones que no sean demasiado gruesos lo que facilitará el planchado a la par que el cuidado del cabello.
Frecuencia del uso de la plancha para el pelo
Puede ser que te hayas acostumbrado a ver tu pelo lacio y liso cada día, pero si no es tu condición natural, estarás castigándole con la plancha, y las consecuencias, tarde o tempranos, acabarán haciéndose notar.
Por eso te aconsejamos que dejes descansar tu melena como mínimo uno o dos días, para que no se debilite en exceso y vuelva a tomar su fuerza natural.