Depilarse con cera caliente en casa es una buena opción. En este artículo te explico algunos aspectos que debes de tener en cuenta antes de adentrarte en tu propia sesión de belleza, y también algunos trucos para que todo salga como en un auténtico centro estético.
¡Toma nota de ellos!
Depilarse en casa no tiene por qué ser un suplicio, y si no eres capaz de acostumbrarte a las nuevas maquinillas, continúar usando el método tradicional de la cera continúa siendo una buena opción.
Y es que esta cera caliente, las bandas de cera fría suelen ser más dolorosas ya que al no dilatar el poro, provocan más tirantez en la piel, y la sensación de dolor aumentar, no es sino una resina derrtida, que se aplica fácilmente, a modo de roll-on con un palillo de forma fácil, y que se adhiere a los pocos segundos a tu piel, pegando el vello con facilidad.
Aspectos a tener en cuenta antes de hacerse la cera en casa:
- La piel tiene que estar limpia y seca. Así que, no dudes en exfoliarla.
- Calienta la cera en una olla o en el micro, a la temperatura adecuada que te indiquen las instrucciones.
- Para depilarte las piernas, aplica la cera formando bandas de unos 5 cm de largo y 1 cm de grosor. Así te será más sencillo luego despegarla de un solo tirón sin ocasionarte mayores molestias y proporcionándote un resultado perfecto sin complicaciones.
- Ten precaución para no quemarte.
- El vello, debe de medir unos 5mm y no te olvides posteriormente de aplicarte una locción de crema para relajar la zona depilada y nutrirla de nuevo.
Y ahora… ¡Unos cuantos trucos nunca vienen mal!
- Arranca la cera en el sentido opuesto al que crece el vello para evitar que se formen pequeños quistes enrojecidos.
- Los polvos de talco pueden ser tus aliados tras retirar la banda. Suavizan y calman la piel entre el depilado y la aplicación de la locción.