El dolor muscular es una molestia muy frecuente que llega a comprometer a más de un músculo y que está asociado a sobrecargas, lesiones e incluso al estrés. Descubre el papel que juegan los alimentos así como la fitoterapia para poder tratarlos.
Cómo alimentar los músculos
Una incorrecta alimentación se ha demostrado que provoca numerosas consecuencias en el organismo como por ejemplo un retraso en el crecimiento, trastornos circulatorios, sobrepeso, anorexia, daños cerebrales, colesterol, diabetes o hipertensión entre otras.
De igual manera puede causar dolores musculares que sumados a otras circunstancias como las exigencias laborales o el estrés, repercuten en algunas hormonas del organismo provocando una esfuerzo exagerado en nuestros músculos causando debilidad y agotamiento llegando a dañarlos finalmente con el tiempo.
Los nutricionistas apuestan por incorporan alimentos que sean ricos en magnesio para reducir esos episodios de dolor. Este mineral lo podemos encontrar en los espárragos y en la lechuga demás de en las semillas, en la levadura de cerveza, en los frutos secos y en el germen de trigo.
Consumir también alimentos que sean ricos en calcio como la leche, el queso y los yogures evita que se produzcan espasmos musculares y los que contienen vitamina C protegen nuestras células de su degeneración natural además de reducir igualmente los dolores musculares debido a sus propiedades antioxidantes.
También hay que tener en cuenta los alimentos que contienen silicio como los cereales, las proteínas de origen animal, las fibras y las legumbres que mantienen nuestros tendones y músculos en perfecto estado.
El selenio por su parte ayuda a reducir la sensación de dolor y se encuentra en los ajos, las cebollas, la coliflor, los pepinos, las calabazas y las manzanas.
Los ácidos grasos omega 3 que están presentes en los pescados azules, en la nuez, en el germen de trigo y en la soja entre otros, deben incluirse igualmente en nuestra dieta y se debe evitar el consumo de alimentos que sean ricos en cloro, el fósforo y en azufre, así como las grasas saturadas.
Soluciones verdes
Existen algunos remedios naturales que nos ayudarán a aliviar el dolor muscular como por ejemplo utilizar el laurel en forma de cataplasma; tomar un té de manzanilla o preparar en 250 ml. de agua previamente hervida dos gramos de corteza de sauce seca que contiene salicina.
El hipérico igualmente es un excelente remedio para combatir el dolor muscular. Se debe preparar una infusión con una cuchara de esta hierba por cada taza de agua y se recomienda beberla dos veces al día.
En 250 aproximadamente de aceite de oliva también podemos agregar 25 ml. de aceite de espliego para mezclarlo todo bien y realizar masajes en la zona afectada para aliviar las contracturas y desinflamarlas.
Otra solución es preparar en un litro de agua 100 gramos de cola de caballo y cocerla. Cuando esté templada se debe beber dos veces en el día.
Aplicar aceites de pino o de eucalipto reduce los dolores musculares así como frotar toda la zona dolorida con un poco de vinagre de manzana.