Cómo curarse con tomillo y albahaca. Parte II

No es necesario salir de tu casa para poder disfrutar de un botiquín de salud que siempre se mantendrá fresco y es que tanto la albahaca como el tomillo pueden cultivarse fácilmente en maceteros y tenerlos dentro de nuestro patio, en el jardín o en la terraza para poder beneficiarnos cómodamente de sus múltiples beneficios. Cómo curarse con tomillo y albahaca. Parte II

Tomillo

El tomillo es la especia perfecta para ser empleada en la cocina por sus innumerables cualidades gastronómicas. Su fragancia es muy intensa y llega a alcanzar hasta una altura de 25 centímetros contando con unas ramas muy delicadas y unas hojas ovaladas y pequeñas que florecen en los meses de calor y cuya tonalidad varía entre el rosado y el lila.

Consejos culinarios

El tomillo es una especia que se utiliza mucho en la gastronomía de Francia y que otorga un peculiar sabor a una de las especialidades culinarias más famosas francesas como es su sopa de almejas.

Las hojas y las ramas de tomillo también pueden incorporarse en las ensaladas a las que da un sabor muy especial.

A la hora de preparar sopas y caldos, el tomillo resulta una especia muy útil y casi indispensable.

Otra manera muy deliciosa de usar el tomillo es la de servirlo sobre algunas rodajas de remolacha que hayan sido previamente cubiertas con yogur. De igual manera aliñar con esta planta algunos tubérculos y vegetales como las cebollas, los tomates, las zanahorias, las patatas, los espárragos y las espinacas es una manera muy deliciosa y diferente de llegar a disfrutar de dichos alimentos.

También resulta ideal si se sirve sobre las carnes, los pescados o las carnes de ave sobre todo si éstos se asan a la parrilla.

Poderes medicinales

Si has tomado algún jarabe para la tos es más que probable que hayas notado el sabor de esta especia, puesto que gracias a sus propiedades antiespasmódicas hace que se emplee frecuentemente en la preparación de dichos jarabes que ayudan a controlar una tos persistente.

Una infusión de hojas de tomillo frío ayuda a combatir las molestias del estómago. Tomada caliente es recomendable para los cólicos, las flatulencias, las dismenorreas y para calmar los nervios.

En el exterior el tomillo puede ser aplicado como una cataplasma para sanar llagas y para aliviar inflamaciones.

En cualquier caso es importante recordar que la esencia de esta especia es el timol, siendo éste un ácido que puede llegar a resultar muy tóxico si es ingerido en su forma más pura lo que puede provocar vómitos, mareos y debilidad de los músculos además de que consigue dificultar el funcionamiento del corazón y el respiratorio, incluso llegando a estimular de una manera excesiva la glándula tiroides provocando hipertiroidismo.

El aceite de tomillo, de igual manera, puede irritar la piel por lo que es necesario tener cuidado a la hora de preparar una cataplasma para tratar lesiones de la piel o llagas. En este último caso se recomienda hacer una prueba de alergia a esta especia en alguna parte de nuestra piel, antes de aplicarla de una manera más amplia.