Siguiendo nuestro recorrido por las especies más populares de peces que suelen poblar nuestros acuarios, hoy le toca el turno a uno de los de más belleza, el cual se ha convertido incluso, podríamos decir, en el prototipo o símbolo de pez tropical. Este ejemplar, que también es llamado “pez ángel”, procede principalmente de la cuenca del Amazonas, en Brasil, Perú y Colombia. Su perfil es circular, con el cuerpo muy alto y plano. Sus aletas dorsal y anal tienen forma de triángulo, mientras que las pélvicas parecen largos bigotes. En su hábitat natural o en acuarios donde tengan el suficiente espacio, pueden llegar a medir incluso 25 cm. de altura y 15 de largo.
En cuanto a su cuidado, necesita una temperatura de entre 22º a 28º, y agua con PH de 7 a 7’6. Es necesario que disponga de una buena iluminación, así como de mucha vegetación. Como decoracíon, son idóneas las rocas de cuarzo o de fluorita.
El escalare es un pez normalmente muy pacífico. Conviven en perfecta armonía con peces de otras especies, aunque sean muy pequeños, siempre que hayan crecido junto a ellas. Si se pone un pez nuevo en el acuario, cabe la posibilidad de que le ataque.
Es un pez longevo, que puede vivir entre 7 y 9 años. Si las condiciones del acuario son buenas, incluso puede vivir más tiempo. De hecho necesitan mucho espacio, y que el acuario sea alto, ya que suelen nadar en vertical. Es recomendable un solo ejemplar por cada 50 litros de agua.
La reproducción de estos peces es un poco más complicada, ya que hemos de estar al tanto de cuándo forman una pareja, cosa que notaremos porque se apartan de los demás. En este momento deben colocarse en otro acuario con plantas y rocas, hasta que la hembra ponga los huevos, que el macho fertilizará. A las 48 horas ya eclosionarán, y serán cuidados por los padres, siendo convenientes separarlos al séptimo día.