Mes de Diciembre.
Ansiedad, estrés, alegría, tristeza, diversión, festejos, nervios…
Sabido está que esta es la época mas divertida del año, pues llegan las fiestas de cierre del año, la navidad, la llegada del año nuevo
En diciembre todas las rutinas estallan. Reuniones, llamados, tarjetas, regalos, parientes que van y que vienen, preparativos pre-vacaciones, balances, compras… (y podríamos continuar enumerando), todo esto, acumulado en un breve período de 31 días. Sumado al ajetreo exterior, aparecen los ajustes interiores: lo que te has prometido hacer y no has podido cumplir, las deudas pendientes para los próximos 12 meses y la esperanza de que las cosas marchen mejor en tu vida sentimental, económica y laboral.
¿Por qué tanta aceleración acumulada en tan pocos días?. A veces sentimos como si en el mes de diciembre se viniera el fin del mundo, pero no es tan grave, pues tan solo se trata del fin de otro año. En esta época las personas sienten que les queda poco tiempo para realizar todo aquello que les ha quedado pendiente. Mucha gente tiene temor de no llegar a cumplir las metas que se ha propuesto al iniciar dicho año. A todo esto, se le suma que es una época de replanteos. Por supuesto, todo depende de la personalidad de cada uno. Hay personas que se excitan frente a un balance positivo de los logros del año, y otros que, al realizar dicho balance, temen enfrentarse a la crisis de no haber resuelto ciertas cuestiones, o no admitir sus frustraciones. Por eso, si te sientes desbordada y completamente ansiosa en esta época del año, lo mejor es adoptar algunas actitudes inteligentes que te devolverán la paz interior. Para empezar, algo que parece evidente, permitirse disfrutar. Darnos permiso para ser felices sin culpas. Otro punto importante es ponernos un orden de prioridades, sin sobrecargarnos de tareas. Organizar las tareas que debemos cumplir con horarios determinados, horarios posibles. Esto implica distribuir las obligaciones en los diferentes días del mes para que no resulten una tortura. Para aquellas personas súper organizadas y controladoras, aquellas que detestan que las cosas se les vayan de las manos, el mejor consejo es intentar relajarse y disfrutar.
El balance de fin de año: Inevitablemente, consciente o inconscientemente todas lo realizamos, y no debe darnos miedo, pues debemos ser benignas con nosotras mismas. Debemos sentirnos gratificadas por nuestros logros y plantearnos porque no hemos podido cumplir aquellos objetivos que nos hayan quedado pendientes. También hay que tener presente que no podemos pretender hacer en 1 mes lo que no hemos hecho en los 11 anteriores, por eso, lo mejor que se puede hacer ante esta situación es meditar el mejor camino para conseguir dichas cosas más adelante.
Y para terminar, te daremos algunos consejos anti-estrés, para que no enloquezcas:
- Déjate días libres para quedarte en tu casa y desconecta el teléfono. Aprovecha para dormir y descansar.
- Organiza cada día durante la noche anterior. Pues de esta manera, sabiendo lo que harás durante el día, bajaras los niveles de ansiedad.
- No debes exigirte imposibles: Saludar a todos tus conocidos, ir a todas las reuniones, comprar todos los regalos, decorar la casa impecable, cerrar el balance y encima estar depilada y arreglada las 24 hs. de los 31 días del mes es…¡Imposible!.
- Permítete faltar a donde no tengas ganas de ir.
Y para terminar: DISFRUTAR, CELEBRAR, RELAJARSE Y CELEBRAR son las claves para cerrar el año con un broche de oro.