Aquí tienes algunas formas de controlar tus ganas de comer en las noches
Puedes o no estar siguiendo un plan de dieta y hacer ejercicio todos los días, pero en cualquiera de los casos, andar picando comida en la noche tiene efectos negativos en el cuerpo. Es muy importante controlar y frenar las comidas tipo antojo en la noche.
En las noches el metabolismo es extremadamente bajo, por lo tanto, es más fácil subir de peso. Aquí están algunas maneras de frenar los hábitos alimenticios por la noche.
1. Tener suficientes comidas durante todo el día
Para evitar el hambre en la noche tienes que tener comida suficiente durante el día. Si controlas tu hambre durante el día no pasarás trabajo, por ello es mejor comer tus comidas a tiempo y no en exceso por la noche. Comer sano durante el día y mantener tu estómago lleno te ayudará a frenar comer bocadillos durante la noche.
2. Almacena alimentos saludables
Si pierdes el control y terminas comiendo tarde, trata de comer cualquier cosa que sea ligera y saludable. Si te abasteces de aperitivos en una dieta saludable como frutas y productos sin calorías, el consumo no afecta realmente tu cuerpo. Esto te ayudará a evitar la ingesta de comida basura y calorías innecesarias.
3. Bebe mucha agua
Bebe un vaso de agua o una taza de té de hierbas verde para frenar tus ansias. Cuando se consumen fluidos estás utilizando un sustituto que te ayudará a evitar el consumo de cualquier aperitivo pesado que te haga engordar.
4. Come una pequeña porción de comida
Si realmente tienes ganas de comer algo tarde en la noche, sólo come una porción muy pequeña de la misma. De esta manera podrías obtener el sabor de lo que quieres comer. No estás comiendo una gran parte de calorias que tendrian efecto sobre ti.
5. Distráete haciendo otras cosas
Si te apetece comer por la noche, trata de distraerte. Haz algo que te mantenga las manos y la mente ocupada. Trata de resolver algún crucigrama, lee cualquier artículo o libro interesante o, sal y da un paseo.
6. No te quedes hasta tarde en la noche
Es mejor dormir temprano, en especial una hora después de la cena. Cuando estás saciada, te puedes tomar una buena noche de sueño.
7. No abastecer tu nevera con productos ricos en calorías
Es mejor tener sólo frutas frescas, verduras, leche y frutos secos en lugar de tener barras de chocolate o papas fritas en la cocina.