También conocida como
Principios activos del harpagofito
Se piensa que el efecto de esta planta no se debe en concreto a un principio activo, sino que sus beneficios se deben a la mezcla de todos ellos entre los que podemos destacar los iridoides, que inhiben la síntesis de las prostaglandinas que son las hormonas que causan el dolor y reducen la permeabilidad de las células, lo que disminuye la inflamación de una manera general.
El betasitosterol por otra parte inhibe la enzima que se encarga de fabricar las prostaglandinas lo que significa que junto con los iridoides se potencia enormemente la actividad analgésica y antiinflamatoria de esta planta.
En cualquier caso y aunque el harpagófito cuenta con unas magníficas propiedades, es necesario tomar una serie de precauciones por su actividad oxitócica, es decir que induce al parto, por lo que debe evitarse en caso de estar embarazada. De igual formar tiene que ser ingerido en cantidades moderadas puesto que en altas dosis puede llegar a provocar una congestión hepática. Tampoco se recomienda que se emplee durante tiempo prolongado en aquellas personas que tengan problemas de úlceras gastrointestinales.
¿Cuáles son las cantidades adecuadas?
La decocción suele ser la manera más tolerada para consumirlo aunque su sabor puede llegar a provocar vómitos y náuseas en algunas personas.
Debe utilizarse entre cinco y quince gramos de esta planta por cada ½ litro de agua que dejaremos reposar durante toda la noche para beberlo filtrado frío al día siguiente y sin endulzar.
Si no se puede soportar su sabor puede tomarse en comprimidos, de cuatro a seis de 500 mg. que se repartirán a lo largo del día. También puede ser tomado en gotas aunque en estos casos debe hacerse en una presentación que sea gastrorresistente puesto que el jugo gástrico logra destruir los iridoides, por lo que es necesario aumentar su dosis. Si queremos que esta preparación tenga un efecto digestivo hepático se recomienda que las gotas se presenten en soluciones alcohólicas como su tintura madre.
También es cierto que en casos agudos de dolores no suele funcionar tan bien como lo hace ante situaciones crónicas de manera que a las dosis que se recomiendan, pueden ser ingeridas durante temporadas bien largas. De esta manera podremos evitar tratamientos a base de analgésicos sintéticos y cuyas contraindicaciones y efectos secundarios son bastante más adversos que los de la harpagofito.
Uso del harpagofito
Según diversos estudios clínicos se ha mostrado la efectividad de esta planta en el tratamiento de esos dolores que están relacionados con la fibromalgia, la artrosis, la osteoartritis, la lumbalgia crónica y otras afecciones articulares sean de origen reumático o no.
Es importante tener en cuenta que su uso está contraindicado en caso de padecer úlcera gastroduodenal.
Aunque no se han descrito interacciones es conveniente estar atento ante una posible interacción con medicaciones antirrítmicas.
Como efectos secundarios pueden aparecer náuseas, diarrea o molestias gástricas sobre todo en personas predispuestas a ello y cuando lo consumen en dosis altas.