Está comprobado que algunos alimentos logran estimular la producción de dopamina, serotonina y endorfinas que son neurotransmisores y hormonas responsables de conseguir un
Lograr el equilibrio por fuera y por dentro
Existen algunos alimentos que tienen una proporción de aminoácidos naturales que se aproximan mucho a la ideal por lo que se asimilan casi por completo todas sus proteínas. El queso, la leche, el pescado, la carne y los huevos consiguen aportar lo que conocemos como proteínas completas.
Por otra parte la mayoría de las proteínas vegetales son incompletas, como por ejemplo las que se encuentran en el extracto del germen de trigo, de la levadura, de los cacahuetes, de las nueces, de la avena, del arroz, de los garbanzos y de las lentejas entre otros. Aunque es cierto que si los combinamos correctamente podemos conseguir proteínas completas que producen sustancias antidepresivas.
Plátanos y nueces
En nuestra dieta no puede faltar el triptófano, aminoácido que contribuye al equilibrio de los mensajeros químicos para lograr la felicidad y que se encuentran en las nueces, los plátanos y la leche. La presencia de dicho aminoácido es esencial para un correcto funcionamiento de la serotonina. Este neurotransmisor proporciona tranquilidad, equilibrio emocional y regula el sueño. Unos niveles bajos de la serotonina se encuentran relacionados con la irritabilidad, trastornos depresivos, una cierta tendencia a la agresividad y la ira.
Otra manera de poder incrementar el nivel de serotonina es consumir comidas ricas en hidratos de carbono y que se encuentran presentes en la leche, en las frutas, en los cereales, en las legumbres, en las verduras, en el azúcar, en la fibra y en la miel. Cuando ingerimos estos alimentos la insulina ayuda a la disminución de otra serie de aminoácidos dentro de la corriente sanguínea lo que facilita que el triptófano llegue hasta nuestro cerebro.
Legumbres y arroz para lograr tranquilidad
Estos dos alimentos además de ser unos complementos proteínicos excelentes, favorecen la producción de las endorfinas además de ser muy ricos en triptófano y en hidratos de carbono para mantener elevado el nivel de serotonina en nuestro cerebro.
Minerales y vitaminas
La vitamina B6, el zinc y el magnesio son igualmente necesarios para que el triptófano pueda convertirse en serotonina y la fenilalanina en dopamina. Un déficit en cualquiera de ellos puede contribuir a un descenso de los niveles en cualquier neurotransmisor.
Los alimentos que son ricos en zinc son el queso, el salvado, el centeno, la avena y los frutos secos. Los que son ricos en magnesio son las judías, los garbanzos, las espinacas, las algas, la avena, los cereales integrales y el tofu de soja y los ricos en vitamina B6 son la levadura de cerveza, las nueces, los plátanos, el germen de trigo, la soja, los huevos, las espinacas, las coles, las zanahorias y las ciruelas.
Duplica tu dosis con el síndrome premenstrual
Para hacer más llevaderos los síntomas típicos premenstruales y evitar esa sensación de depresión, de ansiedad y de irritabilidad, deben consumirse alimentos que sean ricos en carbohidratos como las pastas integrales, las legumbres y el pan sin olvidarse de las verduras y las frutas que son muy necesarias durante estas fechas por ser ricas en vitaminas A, B y C.