Conocer el primer amor para una adolescente requiere de un joven que no solo se vea atractivo, sino que reúna uno que otro requisito en su forma de ser, que las logre conquistar. Un hombre adolescente que recién empieza a experimentar nuevos sentimientos de atracción hacia el género contrario, pero no saben cómo llegar a la niña que les empieza a hacer perder el sueño. En realidad no es tan complicado, y son requisitos que puede tener cualquier persona y si los reúne todos, mucho mejor.
– Lo primero que observan es un joven que tenga confianza en sí mismo, que la demuestre hacia los demás, pero que no tenga una actitud llena de ego o de arrogancia. Debe ser sociable, conversador y buen amigo, sin ínfulas de superioridad y que no se crea mejor que nadie. Si en realidad quieren llegar a conquistar su corazón, deben ser naturales y sencillos.
– Les gusta los hombres que manejen las señales confusas en las que las mujeres son expertas. Por lo general, una mujer dice que está bien, pero puede que sea mentira, puede que sonría, pero en realidad está triste, puede que parezca que se siente cómoda, pero quiere salir corriendo. Hay chicos que tienen la capacidad de identificar este tipo de comportamientos y si lo combinan con ternura y atención, probablemente dejaran locas a esas jovencitas que quieren empezar a conocer el amor.
– Algo que puede llamar la atención y que seguramente dejara boquiabierta a esa mujer, es que un hombre sea atento, que este pendiente de lo que necesita, que la llame, que le pregunte como está, así no sean nada, sino simplemente amigos. El hecho que un día llegue con una caja de chocolates o una invitación de la nada, puede ser un hermoso detalle. Si no se conocen mucho, una mujer valorará que se esfuerce por acercarse y que con un sencillo “hola”, puedan iniciar ese momento de conquista.
– Por último, los cumplidos y piropos son importantes, pues son una forma de reforzar la autoestima que a veces a las mujeres, y más a esta edad de adolescencia, les afecta mucho, pues sienten que están feas, que nadie las mira y que la idea de que alguien las conquiste pasará solo cuando sea adultas. Lo que deben tener en cuenta, es que deben ser muy respetuosos y valorarlas tanto por su belleza, como por su forma de ser.
Pero no hay que afanarse tratando de encontrar el príncipe azul, pues en su debido momento llegará, lo mejor es disfrutar de esa edad, de las mieles del amor, de conocer el amor y de sentir las primeras mariposas, sin necesidad de que tenga que terminar en una relación.