La receta que sigue, aunque la hemos hecho con macarrones, la puedes hacer con cualquier otro tipo de pasta, ya sean tallarines, espaguettis o incluso raviolis. Los platos de pasta son nutritivos y económicos y tienen la ventaja de que suelen gustar a todos, es raro que a alguien le desagrade la pasta. Ingredientes para 4 personas: ¼ de kilo de macarrones, ¼ litro de leche, 4 cucharadas de nata líquida, 100 grs. de jamón dulce, 100 grs. de champiñones, 100 grs. de queso rallado, un poco de nuez moscada, 20 grs. de maicena, 30 grs. de mantequilla, aceite y sal.
Pon una olla al fuego, llena de agua y con un poco de sal y unas gotas de aceite y, cuando hierva, echa en ella los macarrones, dejando que cuezan el tiempo indicado en el paquete, hasta que estén en su punto. Enjuágalos con agua fría, escúrrelos y ponlos en una fuente que pueda ir al horno.
Pon en un cazo 20 grs. de mantequilla, llevándolo al fuego, y dora en ella la maicena, incorporando enseguida la leche y la nata, al mismo tiempo que vas removiendo, para conseguir una salsa fina. Echa un poco de sal y una pizca de nuez moscada. Deja cocer un par de minutos a fuego suave, removiendo.
En otra sartén, pon el resto de la mantequilla y rehoga los champiñones, que previamente habrás cortado a láminas, junto con la mitad del jamón, que habrás picado.
Vierte en la fuente en la que tienes los macarrones tanto la salsa que has hecho como el sofrito de champiñones, y mezcla bien.
Espolvorea con el queso rallado y con la otra mitad del jamón picado.
Gratina hasta que veas que está un poco dorado y sirve caliente.