Mercadillos de Navidad de Europa. Parte I

aaLos días de diciembre, especialmente los últimos del mes, se traducen en un calendario festivo que en muchas ocasiones son sinónimo de viajes. Existen ciertas ciudades europeas que a pesar del frío, invitan a pasear por sus calles y sus mercadillos llenos de encanto. Descubre alguna de ellas y decídete a hacer una escapada estas navidades para conocer lugares que parecen sacados de un cuento.

Mercadillos de navidad en Alemania

Alemania es sin duda, el país preferido para todos los amantes de un mercado navideño. No sólo se trata de comprar artículos para estas fechas, sino de disfrutar del ambiente que se respira en ellos, de comerse unas deliciosas salchichas alemanas y de tomarse un vino caliente, conocido popularmente como Gluhwein y que se elabora con vino tinto, azúcar, canela y unas rodajas de naranja, perfecto para soportar el frío de esta zona de Europa,  mientras se recorren los puestos de Navidad.

Entre las ciudades alemanas más destacables para disfrutar de este ambiente realmente navideño,  se encuentra Berlín, donde cada año se levantan más de cincuenta mercadillos. Para poder recorrerlos todos se necesitarán unas piernas bien fuertes, un buen abrigo y un poco de orientación. Por lo demás, solo resta perderse por sus puestos y comprar todo lo que se te antoje.

Cada 24 de noviembre todos los mercadillos de esta ciudad comienzan a funcionar hasta el fin de las fiestas navideñas. Uno de los más grandes es el de Spandau, donde cada fin de semana pueden llegar a reunirse hasta más de cuatrocientas casetas de madera donde la diversión y las compras se encuentran aseguradas. Otros mercadillos navideños muy interesantes de la capital son los de Gendarmenmarkt o el de WeihnachtsZauber.

En Colonia también se despliegan durante estas fechas varios mercados entre el que destaca el que se levanta junto a la Catedral de Colonia y que ofrece piezas de artesanía de una enorme calidad, así como una exquisita gastronomía del lugar. Y es que hasta en la propia calle se puede disfrutar de la singular cocina alemana rodeados de luces y colores propios de la Navidad.

En Nuremberg se encuentra el mercadillo más grande de todo el país y sin duda el mejor de toda Alemania. Stuttgart igualmente cuenta con numerosos mercadillos que se van diseminando a lo lago del centro de esta ciudad y que cuenta con paradas muy interesantes especializadas en antigüedades.

Los hay también algo más pequeños y con un encanto sin igual como el que cada año se levanta  en Tothenburg, un lugar que aparece ante el turista como una auténtica joya medieval bávara que parece salida de un cuento de hadas. Imagínate este paisaje adornado por ende con bolas navideñas, luces y copos de nieve por encima de todo ello. ¡Simplemente un momento espectacular que harán que estas navidades sean inolvidables!