El pestiño es un dulce muy típico de la comunidad andaluza, en la que suelen comerlo en Semana Santa y Navidad, aunque es adecuado para comerlo todo el año, ya que está exquisito. Esto sí, sin abusar de ellos. 
Ingredientes para 4 personas: 500 grs. de harina, , 2 cucharaditas de canela en polvo, 2 vasos de agua, 1 vaso de vino blanco, 1 cucharada de anís, 1 cucharada de ajonjolí, corteza de naranja, corteza de limón, ralladura de limón, 250 grs. de miel, aceite de oliva y sal.
Pon aceite de oliva en una sartén y fríen en ella las cortezas de limón y de naranja, retirándolas cuando estén fritas. Seguidamente, en el mismo aceite, echa el anís y el ajonjolí, dejando cocer a fuego suave durante 10 minutos para que el aceite se impregne bien del sabor. Pasado este tiempo, cuela el aceite y resérvalo.
Coloca la harina en un recipiente adecuado y echa también la canela, la ralladura de limón y un poco de sal. Mezcla y haz con la harina la forma de un volcán. Echa dentro del agujero el vino blanco, 1 vaso de agua y 200 ml. de aceite. Amasa bien todo, hasta formar una masa homogénea y blanda. Déjala reposar media hora.
Haz los pestiños, dándoles primero forma de tortitas que después curvarás, uniendo las puntas opuestas, dándole así la forma típica de pestiño.
Pon aceite abundante en una sartén y, cuando esté bien caliente, fríe los pestiños.
Coloca la harina en un recipiente . Para hacerlo más fácil puedes calentarlo. Pasa los pestiños por esta mezcla y ya los puedes colocar en la fuente de servir.
