Si ser mamá de un solo bebé es una tarea emocionante pero difícil, es aun mas complejo cuando llegan dos, tres o mas bebés porque a pesar de brindar la ventaja de solo tener un parto en toda la vida, la responsabilidad es enorme y el aprendizaje es de nunca acabar. 
Una mujer siempre tiene dentro de sus sueños ser madre y cuando está en pleno embarazo, no hay dicha mayor a pesar de los malestares comunes. Y cuando nacen la emoción es aun mayor e inexplicable y los cuidados deben ser muy estrictos además que el cansancio es evidente y el miedo notorio. Pero que sucede cuando todo lo anterior tiene que multiplicarse por dos o tres?
Etapa de preparación
Así es, cuando nacen gemelos, mellizos o en algunos casos más de tres, toda la dicha es mucho más grande pero así mismo el esfuerzo debe ser mayor. Inicialmente, con respecto a los preparativos, deben ser estrictos, pues antes de los siete meses todo debe estar listo para ir a la clínica, ya que generalmente se adelanta el parto y es necesario dejar todo ordenado en casa ya que al volver no habrá tiempo para hacer más cosas sino dedicarse totalmente a los pequeños. Algo de esto es la preparación de alimentos y almacenados en el congelador, teléfonos de droguerías y supermercados cercanos para realizar pedidos a domicilio y descansar mucho para tener fuerza, animo y energía para los siguientes días.
Etapa de primeros días
En el posparto el cansancio de la madre es muy marcado pues después de dar a luz a varios bebés su tarea ahora es compleja y duplicada, así que por lo menos durante los primeros días, ella tiene que acoplarse al funcionamiento de los niños. El apoyo del padre es esencial, pues será el apoyo y la mano derecha para realizar ciertas tareas como colaborar con la limpieza, el cambio de pañales, los baños y dormir a los pequeños. Es importante tratar de sincronizar a los bebes para que no hayan mas sobreesfuerzos de los existentes y sea mas fácil realizar las mismas tareas para todos los chiquitines.
Tips para facilitar las tareas
Las dos primeras semanas es de aprendizaje continuo y hay que enfrentar todo lo que se presente sin asustarse o dejar de lado a algún bebe o dejar a medias cualquier actividad.
– Al salir a la calle, es mejor tener compañía para llevarlos, prestar atención por si alguno llora o hace sus necesidades fisiológicas o tal vez si llega a despertarse.
– Si necesariamente se está solo, ya sea el padre o la madre, lo mejor es llevar un coche y una maletincito para cargar lo necesario para ambos.
– Hay que tener una habilidad especial para clamarlos si todos empiezan a llorar, pues por ejemplo en el caso de los gemelos, mientras se alza a uno, al otro se mece y consciente para prestar atención a los dos.
– Es bueno tener lista siempre la maleta con los elementos básicos como pañales, pañitos, polvos y cremas, cambiadores, ropa ocasional entre otros, para evitar estar haciendo cambios o dejar olvidados elementos necesarios pero que no hubo tiempo de preparar.
– Para el baño es mejor que cada papá tome un bebé y evitar accidentes
– Cuando se visite al pediatra, es recomendable que la mamita lleve anotadas sus inquietudes por separado, es decir, notas para cada bebé y así mismo apuntar las soluciones y tratamientos para aplicarlas en casa.
