Hay algunos secretos femeninos, que las chicas no suelen compartir por pena, vergüenza o miedo. Pero es necesario que a veces dejen esas dudas de pedir ayuda y así se eviten la aparición de enfermedades o problemas más graves. Ser mujer no es nada fácil y hay miles de situaciones que pueden poner a las chicas muy nerviosas y ansiosas, y sin contar que algunos de esos miedos las obligan a guardar silencio, porque lo que sufren es algo muy privado o intimo. Puede que el origen de algunas actitudes temerosas de las mujeres se deba a esto:
– El flujo vaginal con un mal olor es muy común en muchas mujeres en todo el mundo, pero pocas saben cómo manejarlo y menos cuando no han tenido una consulta con un ginecólogo o un especialista. Por lo general se presentan en la edad fértil y es generada por bacterias que no necesitan del aire, porque lo que les es tan fácil sobrevivir y mejor si es un ambiente muy húmedo. Lo que hace desesperar a las chicas además del mal olor, es la picazón y el ardor.
– Las verrugas en el área vaginal tienen una inseguridad muy grande y no solo a la hora de comentar su problema, sino para el momento en el que se lleguen a tener relaciones sexuales. La causa son precisamente las relaciones sexuales y aparecen por contacto oral, genital o anal con alguien que este infectado con el virus del papiloma humano. Por eso es recomendable que cada año las mujeres con una vida sexual activa, se realicen un examen para descartar padecimientos o para erradicar la infección.
– La poco conocida dispareunia pero tan vivida por tantas mujeres, es algo que tienen que vivir en silencio, por miedo a lo que piense o diga su pareja o incluso a perderla. Se trata del dolor que se siente a la hora de estar con otra persona y justo en el momento de efectuarse la penetración y en vez de ser un momento agradable y lleno de placer, es angustiante y ocasiona la perdida de interés o excitación. En realidad los tratamientos pueden ser diversos, así como la causas, pues así como puede ser un daño físico, también puede ser a causa de una alteración sicológica.
– El dolor en los senos también es bastante común y sobre todo cuando se está en los días del periodo. Pero en realidad no es nada agradable y menos cuando se tienen relaciones, pues frecuentemente aparecen días antes de que el sangrado aparezca. Por otro lado, el dolor puede ser tan fuerte, que puede afectar actividades comunes como dormir.
– Tener un seno más grande que otro no es para nada agradable y aunque a simple vista no se note, si las hace sentir muy mal. Cuando están desnudas es fácil notarlo frente a un espejo e incluso se percibe al usar el sostén, pues habrá una copa que quede perfectamente, pero otra quedara o muy grande o muy pequeña.