Incluir unos huevos en el desayuno, lejos de ser algo perjudicial para la salud, ayuda a afrontar con muchas más energías el día además de lograr saciarnos, por lo que también favorece la pérdida de peso.
Y es que salir de casa perfectamente alimentados es fundamental para empezar bien el día y con el combustible adecuado para que el cerebro funcione correctamente, y para que el estómago esté saciado hasta la hora de comer. Si eres de las personas que evita en el desayuno los huevos porque piensas que te hacen subir de peso y que elevan los niveles del colesterol malo, lee el siguiente artículo.
Huevos en el desayuno: adecuados para la salud cardiovascular
Un consumo equilibrado de huevos no eleva el colesterol ni tampoco influye en los niveles de lípidos en la sangre. Y es que los huevos aportan fosfolípidos así como grasas insaturadas, además de antioxidantes y vitaminas que favorecen la prevención de arteriosclerosis.
Según los expertos no pasa nada si durante toda la semana se consumen entre tres y cinco huevos, es más, el corazón queda protegido y fortalecido siempre y cuando se acompañe de una dieta equilibrada y sana, por ejemplo, no es lo mismo comer un huevo cocido que unos huevos fritos con salchichas y bacon, ya que en este último caso las grasas saturadas ya supondrán un riesgo para la salud.
Maneras saludables de consumir huevos para el desayuno
Tortitas de plátano y avena
- Ingredientes:
- Un plátano
- Cinco cucharas de avena
- Un huevo
- Un cuchara pequeña de ralladura de limón
Lo primero que hay que hacer es pasar el plátano por un pasapurés hasta conseguir una pasta fina, se me mezclará después con la yema y con la clara del huevo. Después se añade la ralladura del limón y cinco cucharas de avena para mezclar bien todo y crear una masa compacta. Para finalizar se fríe en una sartén bien caliente como si fuera una tortita. ¡Verás que rico está!
Huevos con fresas, espinacas y pasas
Ingredientes que se necesitas:
- Un huevo cocido
- Cien gramos de espinacas frescas
- Ocho fresas
- Un puñado de pasas
Esta original ensalada resulta tan saciante como sabrosa y es muy adecuada para comenzar el día de buenas maneras y con buenas energías. A la hora de prepararla solo se necesita tener preparado un huevo duro que se cortará en finas láminas.
A continuación se lavan las fresas y se cortan por la mitad. Las espinacas también se lavan y se introducen en un bol al que se añaden las fresas, las pasas y el huevo. Esta receta es muy rica en fibra, vitaminas C y B y proteínas que ayudará a regular el tránsito intestinal, a cuidar el corazón y a mantener a raya la línea. Por todo esto, no debes olvidar incluir en tu desayuno un huevo.