Son muchas las personas que suelen encontrarse cansadas y agotadas de una manera permanente. A este cuadro se le conoce como fatiga crónica o astenia, afección que se caracteriza por un cansancio profundo que no está causado por ninguna enfermedad mental ni física y que no mejora ni descansando.
Soluciones verdes contra la fatiga
Una de las maneras más claras en las que se manifiesta la fatiga crónica es con un enorme cansancio aún después de haber realizado esfuerzos moderados. Igualmente aparece dolor en los músculos y debilidad, dolor de cabeza y de articulaciones, hinchazón de los ganglios del cuello y axilares, fiebre no demasiado elevada, una necesidad de dormir demasiado, falta de concentración y problemas de memoria.
Cuando aparecen estos síntomas se pueden utilizar algunas plantas para aumentar la inmunidad del organismo y aliviar dichos síntomas entre las que cabe destacar:
El diente de león, el abedul y la cola de caballo. Combinando estas tres plantas se logrará depurar el organismo. Para ello se deben mezclar a partes iguales empleando una cucharada de dicha mezcla por una taza de agua. Se dejará reposar y se van bebiendo tres infusiones durante el día.
El zumo del aloe vera estimula las defensas inmunitarias y para consumirlo correctamente se deben extraer de sus hojas la pulpa.
El astrágalo favorece igualmente el sistema inmune y un uso periódico de esta planta ayuda a favorecer la resistencia en el desarrollo de esta enfermedad e incluso a su desaparición. Se debe preparar una infusión con su raíz seca y beber dos tazas diarias.
El cardo mariano es antiasténico fundamentalmente. Se deben tomar tres tazas a diario después de cada comida con tres gramos de esta planta por cada taza de agua.
El ginseng incrementa el rendimiento intelectual y físico y revitaliza nuestro organismo debido a que contienen ginsenósidos, principios que estabilizan el equilibrio corporal. Por cada taza de agua se debe añadir una cuchara pequeña de esta planta y beber una vez al día.
La glicirricina que contiene la planta del regaliz tiene propiedades hipertensoras que son muy útiles para levantar el ánimo y subir la tensión arterial, algo típico en las personas que padecen de fatiga crónica. Es recomendable preparar una infusión con media cuchara de esta raíz seca bien triturada por cada vaso de agua y beber dos tazas en el día.
El romero por su parte es un tónico general que debe preparase con cinco gramos de esta planta por cada taza de agua y tomarlo en ayunas.
El té verde así mismo es estimulante y tienen una acción excitante y tonificante, perfecta para luchar contra la fatiga si se bebe una infusión al día.
Algo que tampoco se debe olvidar
Además de los remedios naturales mencionados debe realizarse ejercicio con regularidad, preferiblemente al aire libre, así como evitar el estrés, llevar una dieta sana, descansar correctamente antes de realizar un esfuerzo que no sea habitual y realizar terapias de tipo alternativo como por ejemplo el yoga, el chi kung o el taichi.