La cocina cuenta con secretos incluso en los platos más sencillos, aquellos platos que jamás salen como los que prepara la abuela o mamá. Por eso queremos compartir contigo algunos trucos para que tus platos queden exquisitos.
Una encuesta realizada a personas no dedicadas a la gastronomía reveló que los 5 platillos más difíciles de cocinar son: la polenta, el huevo escalfado, la salsa bechamel y el risotto.
La polenta
Este es un plato que en el instante en que te descuides un solo momento, se acaba convirtiendo en un gran montón de grumos. Para evitarlo hay un secreto: en una olla con agua y sal hirviendo, se echa la polenta muy despacio pero de manera constante mientras se bate continuamente con una cuchara de madera. La proporción perfecta es cinco tazas de agua y una taza de polenta.
En el momento en que la polenta está ya en el agua y ésta comience de nuevo a hervir, se continua batiendo durante uno o dos minutos más.
El huevo escalfado
Un huevo preparado de esta manera es una auténtica delicia si se consigue hacerlo bien. Y el secreto en este caso es hervir en una olla el agua suficiente como para que el huevo quede totalmente sumergido. A continuación se añade un chorro de vinagre y se apaga el fuego. En un tazón se rompe el huevo y con mucho cuidado se desliza en el agua de la olla.
Se tapa la misma y se deja que repose durante cuatro minutos. Para terminar se retira con la ayuda de una cucharón que tenga ranuras para que escurra el agua bien y se disfruta con unas tostadas y un poco de jamón por ejemplo.
Salsa bechamel
Este tipo de salsa es una opción excelente para acompañar las verduras hervidas o la pasta, y por supuesto, para elaborar unas exquisitas croquetas. El sabor que tiene es incomparable y si te gusta el queso, puede convertirse en su gran aliado.
El secreto para que siempre salga riquísima es cocinar en una olla una cuchara de harina junto con una de mantequilla sin dejar ni un momento de remover. A continuación se añade una taza de leche y se revuelve con la ayuda de una cuchara de madera hasta que comience a hervir y después a espesar.
Es muy importante que la preparación se haga a fuego medio y que no se deje de remover. Para dar un toque especial hay que añadir un poco de sal y de nuez moscada.
Risotto
El arroz resulta una comida de lo más versátil, aunque su cocción no resulta siempre como se espera, quedando en ocasiones o demasiado cocinado o algo crudo. El secreto para que te quede un risotto perfecto es no agregar todo el caldo de una sola vez. Mientras el arroz se mantiene a fuego lento, se debe ir añadiendo el caldo, pero según se vaya consumiendo, no antes, y no dejar de removerlo. El tiempo de cocción ideal es de veinticinco minutos.
